Una vez escuché a un
charlatán contar un cuento tan lleno de ambigüedad que hasta el mismo narrador
creyó que su imaginación le proporcionaba pensamientos de locura cruzados con
otros de ternura llenos de emoción, ideas retorcidas, inquietas y a veces hasta
sensatas que parecían recuerdos de sueños alguna vez placenteros y otros
auténticas pesadillas.
Así fue… o no.
Erase una vez, un rey de un lejano reino que siempre estaba
triste porque no quería ser rey, solo quería ser príncipe, pues pensaba que los
príncipes eran más jóvenes y más guapos que los reyes.
Un día llamó al gran mago real, porque en los cuentos todos los reyes tienen magos
reales, y le ordenó que lo convirtiera en príncipe.
El mago obedeció a su rey, y así por la noche
mientras dormía el rey fue convertido en príncipe.
Cuando el rey que ya no lo era despertó, vio
que se había convertido en príncipe, pero seguía siendo viejo y feo, y él
quería ser un príncipe joven y guapo.
El rey que ya no lo era, volvió a llamar al
mago y le ordenó que lo convirtiera en un príncipe joven y guapo.
Durante la noche siguiente el mago convirtió
al rey que ya no lo era, en un príncipe joven y guapo, y éste cuando despertó
vio que había perdido su reino, pues los príncipes no tienen reinos.
Entonces el rey que ya no lo era, llamó otra
vez a su gran mago y le ordenó que lo convirtiera en un príncipe con reino.
Durante la noche el mago convirtió al rey
que ya no lo era, en un príncipe con reino, y cuando despertó vio que ya no era
un príncipe joven y guapo, ahora era un sapo.
De nuevo llamó al gran mago y le preguntó
por qué lo había convertido en un sapo, a lo que el mago contestó que ahora era
un príncipe encantado que reinaba en toda una laguna, y además ya se le habían
acabado todos los encantamientos para convertirlo otra vez en príncipe, y solo
existía la posibilidad de reconvertirse otra vez, si una bella
princesa lo besaba.
El rey que ya no lo era, ni era un príncipe
joven y guapo, reinó en su laguna durante muchos años, y un día una bella princesa que paseaba cerca de la laguna
encontró al rey que ya no lo era, lo cogió entre sus manos y mirándolo a los
ojos dijo: vaya sapo hermoso que he encontrado, parece un príncipe encantado,
lo voy a besar….
La princesa besó al sapo pero no pasó nada
porque la magia que hace el mago de este cuento solo funciona por la noche
cuando duermen.
Así que a la mañana siguiente el sapo se
había convertido en un príncipe guapo, pero ya no era joven porque habían pasado
muchos años, y además la princesa se marchó tras besar al sapo porque no había sucedido nada.
El rey que ya no lo era, pero era un
príncipe guapo pero viejo, comenzó a buscar a su mago. Pasó mucho tiempo
buscándolo, pues el reino de cuando fue rey era muy grande y además caminaba
muy despacio porque ahora era viejo.
Cuando encontró a su mago le ordenó que lo
convirtiera en rey, aunque no fuera tan guapo ya que ahora solo quería
recuperar su reino y su juventud.
Entonces el mago le contestó que él ya se
había jubilado y no tenía más poderes, pero conocía la solución para que el rey
que no era, recuperara su trono y su juventud
El mago le contó el secreto de su magia y le dijo; tus deseos se cumplen por la noche
cuando duermes porque sueñas, y tus deseos son solo sueños. Si eres capaz de
soñar en cualquier momento, así tus deseos siempre podrás convertirlos en realidad.
Entonces el rey que no era, comenzó a soñar
muy fuerte, tan fuerte que todos sus deseos
se realizaron. Recuperó su trono, se hizo joven y guapo y reinó todos
los años que quiso, porque soñar no costaba nada y así conociendo el secreto
que le reveló su mago, vivió feliz durante muchos, muchos años..... Creo que tal vez aún viva, o no.